21 de octubre de 2022

El masajista ciego de Catalin Dorian Florescu

Club de Lectura autónomo "Orlando". Miércoles tardes (Seminario)
Del 19 de octubre

Teodor Moldovan, que escapó de la Rumanía comunista con sus padres a los 19 años para establecerse en Suiza, regresa veinte años más tarde para reencontrarse con Valeria, la mujer a la que abandonó en su huida. En lugar de lograrlo, acabará encallado en el balneario y residencia vacacional de segunda de Moneasa, donde conoce al misterioso Ion, un masajista ciego y paradójicamente poseedor de una de las bibliotecas más grandes de toda Rumanía. El poder de seducción que emana este personaje impregna una novela en la que abunda una picaresca repleta de hallazgos poéticos y en la que nada es lo que parece.


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2 comentarios:

Anónimo dijo...

Creo que llego un poco tarde pero voy a dar mis impresiones sobre El masajista ciego
La novela se centra en la Rumania postcomunista donde tradición y actualidad se entremezclan. Aparecen las constumbres campesinas con la situación de una Rumania entroncada en Europa pero en la que predomina la corrupción y el deseo de ir a Europa. Nos descubre las diferencias de la Europa conocida como occidental en la persona del protagonista y la situación de la población con una inmensa diferencia entre los nuevos ricos y las pobres. Pero lo interesante para mí ha sido la relación con la literatura y con las historias, que se mantiene en toda la novela, una relación basada en la narración oral, que comienza cuando el protagonista se acuerda de la recopilación de historias tradicionales en su juventud y se personifica en la figura del protagonista ciego que tiene una gran biblioteca en papel como grabada. También se ve en las discursiones del grupos sobre literatura de la que forman parte los alimentos, el tocino, la cebolla y el aguardiente un elemento permanente en la novela y en la vida rumana. La historia parece eso una historia, no una realidad, narrada en primera persona, como las que Teodor había recogido en su juventud. Por ultimo, vemos como a pesar del rechazo al progreso y de todas las reflexiones realizadas en el entorno del masajista se impone el deseo de buscar el futuro en Europa, que se plasma en el final de la novela en el que Ion y los compañeros se van con todo lo que llevaba el protagonista: el traje, dinero. Tambíen me ha llamado la atención como describe los olores, los olores del paisaje, de la comida, de las personas.

Anónimo dijo...

El masajista ciego es una de esas novelas con las que disfrutas la lectura. Son continuas las referencias literarias.Incluso en algún momento propone elegir entre Cioran y Camus. Los dos, según Florescu hablan de soledad. Cioran, sobre la falta de alternativas a ella, puesto que desde el nacimiento hasta la muerte no hay escapatoria, excepto el suicidio (aunque él no se suicidó). Camus, escribía sobre la soledad, pero con la posibilidad de cambiar las cosas, de actuar.
El interés de la lectura se mantiene gracias a la búsqueda de un primer amor abandonado, de historias orales narradas en su juventud por ancianos y por su regreso a Rumanía,lo que él cree una especie de "paraíso" perdido.
Se une a todo ello una crítica al progreso, a nuestra forma de vida como búsqueda del éxito personal que no lleva necesariamente a la felicidad.